Hace muchísimo tiempo que no hago este plato, sin motivo concreto dejé de hacerlo y no volví a acordarme de él hasta ahora que me puse a revisar la libreta de mi madre y a escoger que es lo que iba a cocinar para poner aquí. Recuerdo preparar estas patatas a menudo cuando estudiaba y vivía con mi hermana Marian, así que como podéis suponer la preparación es sencilla, barata y no requiere mucho tiempo.
Ingredientes:
Patatas
Sal
Ajo
Harina
Huevo
Salsa de tomate
Preparación según la receta original :
Las patatas se pelan y cortan en rodajas finas redondas, se adoban con sal y ajo. Se ponen dos rodajas juntas, se rehogan en harina y huevo batido y se doran en aceite, pasándolas una vez doradas a una tartera. Se cubren de salsa de tomate dejándolas cocinar suavemente hasta que estén tiernas. Se sirven.
Salsa de tomate:
Se meten los tomates maduros entre agua hirviendo para escaldarlos un poco, se pelan y trocean, se ponen al fuego en una sarten, se van machacando poco a poco, se les añade un chorro de aceite, se sazonan de sal y un pellizco de azúcar si se quiere corregir la acidez del tomate y se deja que la salsa vaya esperando a fuego suave.
Aclaraciones a la receta :
Como en la receta anterior, en la original no hay ni cantidades ni tiempo, así que os lo explico ahora, Para cuatro personas se usaran unos 2 kilos de patatas medianas, 2 dientes de ajo y la salsa a discreción.
Cuando pongáis las rodajas de patatas juntas de dos en dos escoger aquellas que tengan un tamaño similar, no es que vaya a cambiar el sabor, pero el plato queda más curioso.
Cuando pongáis las rodajas de patatas juntas de dos en dos escoger aquellas que tengan un tamaño similar, no es que vaya a cambiar el sabor, pero el plato queda más curioso.
Procurar que el aceite para freírlas sea abundante y esté bastante caliente, solo se pretende dorar el rebozado.
El tiempo de guiso será unos 20 minutos a fuego suave, no las remováis mucho para que no se deshagan, sólo vigilar que no se peguen.
El tiempo de guiso será unos 20 minutos a fuego suave, no las remováis mucho para que no se deshagan, sólo vigilar que no se peguen.
En cuanto a la salsa de tomate, si escaldar, pelar y lo demás os da pereza, no hay problema en usar una lata de tomate natural triturado, abrir una lata da menos tarea francamente, le añadís un poco de aceite y sal y queda estupendamente igual.
Ualáaaaaa, mi plato preferiso, cuánto tiempo sin comerlas
ResponderEliminar